sábado, 26 de diciembre de 2009

55

En aquel momento, sin embargo, era la unica razon por la cual sonreia y por la que despertarme feliz.
No fue muy dificil enamorarme de el, era todo lo que yo queria, lo que necesitaba en ese momento y quizas lo que habia necesitado toda la vida, aunque se ocupaba siempre de recordame los años de diferencia que teniamos (maldigo una vez mas los ocho años que nos separan y me conformo una vez mas con la condicion de hermano) y de decirme que el sentia lo mismo que yo. A su modo, fue mi mentor: me enseño a expresarme, a tomar decisiones importantes y a desarrollar pensamientos logicos. Pero sobre todas las cosas, era una eminencia en oratoria y persuasion. Y yo, afrontemoslo era una presa facil. Triste, solitaria y necesitada de afecto y contencion. El lobo habia conocido a su cordero.

No hay comentarios.: